¿Ya tienes en mente una idea genial para un relato de amor pero no sabes cómo enfocarla? Puede que estés sentado delante del papel en blanco y no sepas por dónde empezar o, directamente, no sepas cómo escribir una historia de amor por mucho que le pidas ayuda a tu imaginación. ¡Que no cunda el pánico! Aquí tienes cuatro ejercicios de escritura creativa muy sencillos para despertar a las musas y dar rienda suelta a tu creatividad. ¡Manos a la obra!
La carta de amor
Escribir una carta de cualquier tipo es un acto maravilloso de introspección. Normalmente, las cartas se escriben en primera persona y expresan nuestros pensamientos y sentimientos más íntimos. Utilízala como medio para mostrar una historia de amor pasada (los personajes contactan después de años sin verse), presente (los personajes viven su amor a distancia), o futura (lo que comienza con cartas, acaba siendo algo más).
No te pongas límite de extensión, escribe tanto como quieras. Y no olvides hablar de emociones, tanto positivas como negativas, y describirlas en detalle. Tu objetivo siempre debe ser conmover al lector.
La declaración de amor
¡Aquí va el segundo ejercicio! Puedes escribir tres declaraciones de amor diferentes en una página cada una. Los personajes pueden ser los mismos, pero los ambientes y situaciones que provocan la declaración deben ser distintos. El tipo de declaración puede variar: confesar una atracción física, pedir una cita, inicio de noviazgo, pedir en matrimonio… También puedes cambiar el tono del texto: desde lo cómico a lo dramático, pasando por el absurdo.
Debes pensar que relaciones y tipos de amor hay tantos como personas en el mundo. ¡Deja volar tu imaginación! También puedes buscar inspiración en novelas románticas juveniles que te hayan gustado:
El amor viajero
Elige un medio de transporte y desarrolla cómo es el encuentro de dos personajes. ¿Quiénes son? ¿Cómo se conocen? ¿De dónde vienen? ¿Adónde van? ¿De qué hablan? ¿Por qué se gustan? ¿Siguen su camino o se detienen? ¿Volverán a verse? Los medios de transporte siempre esconden cierto enigma en las historias, pues suponen un cambio de rumbo para los personajes que, según decidas, puede ser determinante en sus vidas. ¡El viaje nos espera!
Una historia crossover
Un crossover de ficción consiste en provocar el cruce o interacción de personajes y ambientes de dos historias distintas, que coinciden en otro momento y lugar. En este ejercicio, puedes elegir dos o más personajes de una novela, película o serie que te gusten y reunirlos en otro mundo ficticio creado por ti. Por ejemplo, Romeo conoce a Ofelia de vacaciones en una estación de esquí o Ulises tropieza con el señor Darcy en un restaurante, y surge la chispa.
¡Eres libre de crear todas las mezclas que consideres! Seguro que sale una historia de amor interesante o, al menos, un encuentro muy divertido. ¿Quién sabe? Puede ser que las almas gemelas puedan pertener también a épocas históricas completamente diferentes.