
Desde que nuestros hijos son pequeños -antes de nacer, incluso-, los padres nos esforzamos y dedicamos nuestro tiempo a contar cuentos, a poner libros a su alcance, a crear un espacio de lectura en casa donde se sientan cómodos...
Leemos con ellos y delante de ellos, por aquello de que cunda el ejemplo. Y hacemos todo esto porque sabemos los múltiples beneficios que trae consigo la lectura.
Sin embargo, tanto esfuerzo puede venirse abajo por un mal consejo a destiempo. Por eso nos hemos permitido la licencia de crear en clave de humor los 10 mandamientos para odiar la lectura.
¿Los compartes?
